Cómo encontrar una buena residencia para nuestros mayores

 


Nunca será fácil el poder lidiar con la idea de llevar a nuestros adultos mayores a una residencia, separarnos de ellos puede costarnos mucha tristeza, mucho más para ellos y es por eso que debemos dejarlos en buenas manos y en lugares donde realmente puedan atenderlos como ellos se lo merecen.

Tomar la decisión de encontrar una residencia para nuestros abuelos no es una tarea fácil, es por eso que debes valorar algunos aspectos importantes.

Aspectos que debes valorar para encontrar una buena residencia

No te vayas por la primera: Es importante que puedas valorar distintas opciones y no quedarte con la primera que veas. Plantéate la evaluación de cada una de estas residencias y ten en cuenta el estado físico y mental de la persona que se quedará en ese lugar.

Evalúa el entorno social y la calidad del lugar en el que ahora se encuentra viviendo. Debes tener claro que esta decisión es importante para que se pueda sentir a gusto conocer las alternativas y los servicios que te ofrecen.

Si no sabes por donde comenzar a buscar podemos leer aquí y tener una idea de cómo comenzar a hacerlo.

Visita la residencia: Este es otro paso importante. Debes visitar las instalaciones antes de firmar cualquier contrato. Asegúrate de ver cada rincón pues la primera impresión te dará mucha información sobre el lugar y te ayudará a tomar una buena decisión.

Evalúa la buena disposición de las personas para enseñarte las instalaciones y verifica que todos se encuentre limpio y ordenado, de ser posible analiza también a todos los profesionales que trabajan allí y asegúrate de que le ofrezcan un buen trato a cada uno de los residentes.

Pregunta por el funcionamiento el horario: Trasladar una persona a una residencia en una experiencia muy dolorosa tanto para ellos como para su familia, por eso es importante que tengan un protocolo de acogida y adaptación para ellos.

Es indispensable que centro organice la autonomía del residente y que incluya programas fisioterapia.

La ubicación: Estas residencias deben encontrarse cerca del entorno habitual de la persona a la que vamos a ingresar para que en caso de emergencia se pueda llegar a tiempo al lugar, además este debe estar ubicado en un edificio destinado para este tipo de personas y contar con todos los requerimientos que ellos necesiten.

Evalúa la información del centro: Muchas veces este tipo de información no se encuentra a simple vista, pero las autoridades administrativas pueden darte información y mostrarte los permisos y licencias que tú necesites para que puedas tener la certeza de que cumplen con todas las medidas de seguridad, higiene y calidad que este adulto mayor requiere.

Puedes exigir sin ningún problema a la dirección del centro y que te muestren todos los documentos si no los tienen a simple vista.

Verifica las instalaciones: Debes comprobar la accesibilidad al lugar. Verifica que tengan ascensores o si el edificio consta de varios pisos cuál es la salida en caso de emergencia. Si tiene buenas barandillas en los pasillos, buena iluminación, líneas de teléfono instaladas en forma pública para que ellos puedan acceder a llamar a sus familiares cuando ellos lo necesiten, llamadas de emergencia, etc. Solamente deberán haber dos camas por habitación y garantizar el agua caliente y la calefacción.

La alimentación es importante: Pregunta si ellos pueden cubrir las necesidades de cada residente, pues como ya sabemos existen algunos que requieren de alimentos especiales. Las dietas deben estar adaptadas a cada una de las personas y a sus patologías puedes preguntar que tipo de personas elaboran el menú y si tienen nutricionistas que se encargan de este tipo de temas.

Los servicios que ofrece: Pide información de los servicios médicos que ofrece y su personal enfermería. Esto deben tener profesionales cualificados para poder atender a los adultos mayores en caso de cualquier emergencia.

El precio que incluye: Los centros para ancianos no son económicos por eso asegúrate de que en el precio este incluido todo lo que necesitas para que no salgan con sorpresas.

Solicita un presupuesto cerrado pues ahí algunas residencias ofrecen productos o servicios como peluquería o podología y lo cobran aparte a final de mes y podría llevar se una gran sorpresa y por eso que deben asegurarse de todo.

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